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¿Qué es la diversificación y cómo lo hacen los fondos de inversión?

BBVA AM España

09 de febrero de 2024

Una cartera adecuadamente diversificada estará formada por activos que no estén muy correlacionados entre sí. Dos activos no están correlacionados cuando el valor de cualquiera de ellos no este condicionado por la evolución del valor del otro activo o no tenga un comportamiento similar.

Una adecuada diversificación hará que equilibrar los riesgos. El efecto positivo de la diversificación de una cartera de inversión no se nota sobre la rentabilidad sino sobre su riesgo: diversificar busca diluir o minorar el riesgo.

La diversificación proporcionará un mayor potencial de crecimiento, ya que la inversión no dependerá de la evolución de un único valor. Los activos en cartera cuyo valor haya tenido un buen comportamiento compensarán la caída o el peor comportamiento de otros y así se reducirá el riesgo de la cartera.

Claves para diversificar: invertir en valores no correlacionados

Una de las maneras de diversificar el riesgo es invertir en activos cuyo valor y evolución futura no este correlacionado con el valor de las acciones y los bonos, que suelen ser los principales activos en las carteras de los fondos de inversión.

Para que la diversificación cumpla su objetivo de reducir el riesgo de la cartera debe implicar inversión en tipos de activos diferentes: renta variable, renta fija, divisas, materias primas, inmuebles, etc.

No obstante, se deben observar las correlaciones que existen entre los distintos tipos de activos (o de fondos), aunque pertenezcan a clases de activos muy distintas. Si no se hiciese, podría hacer que el ahorrador-inversor este “sobre-diversificado”. Por ejemplo, la renta fija high yield tiene un comportamiento más parecido a la renta variable que a la renta fija tradicional.

Activos e inversiones alternativas

Las inversiones alternativas tienen una baja correlación con los mercados tradicionales de renta variable y renta fija, por lo que podrían ayudar a mejorar la diversificación, reducir la volatilidad e incrementar la rentabilidad de una cartera.

Existen dos tipologías de inversiones alternativas:

  1. Las que invierten en activos tradicionales mediante el uso de métodos no tradicionales. Por ejemplo, los Hedge Fund.
  2. Aquellas que invierte en activos no tradicionales: el capital privado y, en general, los mercados privados.

Hedge Funds y métodos no tradicionales de inversión

Los Hedge Funds o fondos de cobertura son un vehículo para invertir. Son propiamente una institución de inversión colectiva, aunque pueden tener diferentes formas jurídicas: sociedad, fondo de inversión, etc. Los fondos de cobertura tienen gran su libertad de operar:  no suelen tener más limitaciones que las de su propio reglamento.

Capital Privado

Los activos y fondos de capital privado ofrecen una serie de ventajas frente a los activos tradicionales:

  • Están orientados a obtener retornos independientes de la evolución de los mercados.
  • Facilitan la inversión en compañías de menor capitalización no cotizadas.
  • Existe una elevada alineación de intereses entre inversores y dirección de la compañía, con alto grado de implicación de los inversores en la dirección de la misma o en los planes estratégicos a desarrollar.
  • Tienen un enfoque Sostenible en tanto que fomentan la innovación y la actividad emprendedora, e impulsan las mejores prácticas en materia medioambiental, social y de gobierno corporativo.

El capital privado o mercados privados se divide en cuatro subgrupos:

  1. Capital Riesgo (Private Equity): Consiste en la adquisición de compañías no cotizadas para participar en planes estratégicos destinados a aumentar su valor. Se trata de inversiones ilíquidas, con una vida media de 10 años. Ver aquí más detalles.
  2. Deuda Privada: Consiste en la financiación por parte de entidades no bancarias de pequeñas y medianas compañías. La finalidad es acometer proyectos de crecimiento vía incremento de negocio, adquisiciones o refinanciar deuda ya existente.  Ver aquí más detalles.
  3. Real Estate: Inversión en activos inmobiliarios destinados al alquiler o venta a terceros en un determinado tiempo. 
  4. Infraestructuras: Inversión en un conjunto de estructuras físicas y servicios esenciales como carreteras, puentes, aeropuertos, torres de comunicación, etc.

En definitiva, las inversiones alternativas pueden ser un complemento para diversificar una cartera construida con activos tradicionales, por su capacidad para explotar las ineficiencias de los mercados o buscar oportunidades de inversión con visión de largo plazo en compañías no cotizadas, infraestructuras o inmuebles.

Sin embargo, se debe tener en cuenta que, dada la iliquidez y complejidad de la inversión, para su contratación es necesario ajustarse a unos requerimientos, entre otros, un capital mínimo a invertir y no sobrepasar ciertos porcentajes sobre el patrimonio financiero total.

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